يوآش ملك يهوذا
(2مل 12‏:1‏-17)
1 وكانَ يوآشُ ا‏بنَ سَبعِ سِنينَ حينَ ملَكَ، وملَكَ أربَعينَ سنَةً بِأورُشليمَ، وكانَ ا‏سْمُ أمِّهِ ظَبْيَةَ مِنْ بِئرَ سَبْعَ. 2 وعَمِلَ يوآشُ ما هوَ قَويمٌ في نظَرِ الرّبِّ كُلَّ أيّامِ يُوياداعَ الكاهنِ 3 الّذي زَوَّجَهُ بِا‏مرَأتَينِ فوَلَدَ بَنينَ وبَناتٍ.
4 وبَعدَ ذلِكَ عزَمَ يوآشُ على تَجديدِ هَيكلِ الرّبِّ 5 فجَمَعَ الكهَنةَ واللاَّويِّينَ وقالَ لهُم: «أخرُجوا إلى مُدُنِ يَهوذا وا‏جمَعوا مالا مِنْ جميعِ الشَّعبِ لِتَرميمِ هَيكلِ إلهِكُم سنَةً بَعدَ سنَةٍ، وعَجِّلوا». غَيرَ أنَّ اللاَّويِّينَ لم يُعَجِّلوا. 6 فا‏ستَدعى المَلِكُ رئيسَهُم يُوياداعَ وسألَهُ: «لِماذا لم تَطلُبْ مِنَ اللاَّويِّينَ أنْ يأخُذوا مِنْ يَهوذا وأورُشليمَ الضَّريـبةَ‌ الّتي فرَضَها موسى عبدُ الرّبِّ على شعبِهِ لِلعِنايةِ بِـخَيمةِ الشَّهادةِ؟ 7 فعَثَلْيا الأثيمةُ وأتباعُها أهمَلوا الهَيكلَ وا‏ستَعمَلوا جميعَ أدَواتِهِ المُكرَّسَةِ لِلرّبِّ في عِبادةِ البَعلِ».
8 وبِناءً على أمرِ المَلِكِ عَمِلوا صُندوقا ووضَعوهُ عِندَ بابِ الهَيكلِ مِنَ الخارِجِ، 9 ونادوا في يَهوذا وأورُشليمَ بِأنْ يدفَعَ الشَّعبُ الضَّريـبَةَ الّتي فرَضَها علَيهِ موسى عبدُ اللهِ في البرِّيَّةِ. 10 ففَرِحَ جميعُ الشَّعبِ وأعيانُهُ، بِهذا وتَوافَدوا إلى دَفعِ الضَّريـبةِ في الصُّندوقِ حتّى ا‏متَلأَ. 11 وكُلَّما ا‏متَلأَ كانَ يَحمِلُهُ اللاَّويُّونَ إلى ديوانِ المَلِكِ فيُفرِغُهُ رئيسُ الدِّيوانِ ومُعاوِنُ رئيسِ الكهَنةِ، ثُمَّ يأخُذانِهِ ويَرُدَّانِهِ إلى مكانِهِ. وهكذا كانوا يفعَلونَ يوما فيوما حتّى جمَعوا مِنَ المالِ شيئا كثيرا. 12 فأعطاهُ المَلِكُ ويُوياداعُ لِلقائِمينَ بِالعمَلِ على ترميمِ الهَيكلِ، فا‏ستَأجَروا نحَّاتينَ ونجَّارينَ وحدَّادينَ ونحَّاسينَ لِهذا الغرَضِ. 13 وبذَلَ هؤلاءِ العُمَّالُ جَهدَهُم وتَوَفَّقوا بِما عَمِلَت أيديهِم، وأعادوا هَيكلَ اللهِ إلى ما كانَ علَيهِ سابِقا، وثَبَّتوا أركانَهُ. 14 ولمَّا فَرَغوا مِنْ ذلِكَ، أحضَروا ما تبَقَّى مِنَ المالِ إلى المَلِكِ ويُوياداعَ، فعَمِلا بهِ آنيةً وطاساتِ ذهبٍ وفِضَّةٍ لِلخِدمَةِ في الهَيكلِ وتَقديمِ المُحرَقاتِ بِلا ا‏نقِطاعٍ كُلَّ أيّامِ يُوياداعَ.
وفاة يوياداع والعودة إلى الأصنام
15 وشاخَ يُوياداعُ وشَبِـعَ مِنَ الأيّامِ وماتَ وهوَ ا‏بنُ مئَةٍ وثَلاثينَ سنَةً. 16 فدَفَنوهُ في مدينةِ داوُدَ معَ المُلوكِ ا‏عتِرافا بِفَضلِهِ على إِسرائيلَ وبِـجَهدِهِ الّذي بذَلَهُ في خِدمةِ اللهِ وهَيكلِهِ.
17 وبَعدَ وفاةِ يُوياداعَ جاءَ زُعَماءُ يَهوذا وأكَّدوا وَلاءَهُم لِلمَلِكِ، فقَرَّبَهُم وجعَلَهُم مِنْ مُستَشاريهِ. 18 فأهمَلَ الشَّعبُ هَيكلَ الرّبِّ إلهِ آبائِهِم وعبَدوا الأصنامَ وتَماثيلَ أشيرةَ، فحَلَّ غضَبُ اللهِ على يَهوذا وأورُشليمَ لِمَعصيَتِهم هذِهِ. 19 فأرسلَ إليهِم أنبـياءَ ليُنذِروهُم ويَرُدُّوهُم إلى الرّبِّ، فلم يَستَمِعوا.
20 ثُمَّ ا‏ستَولى روحُ اللهِ على زكريّا بنِ يُوياداعَ الكاهنِ فوقَفَ أمامَ الشَّعبِ وقالَ لهُم: «هذا ما قالَ الرّبُّ: لِماذا تُخالِفونَ وصايا الرّبِّ، فتُنزِلونَ الشَّقاءَ بِأنفُسِكُم؟ أهمَلتُمُ الرّبَّ فأهمَلَكُم». 21 فثاروا على زَكريّا ورجَموهُ بِالحجارَةِ بِأمرٍِ مِنَ المَلِكِ يوآشَ في دارِ الهَيكلِ‌. 22 ولم يَذكُرِ المَلِكُ ما كانَ لِـيُوياداعَ أبـي زَكريّا مِنَ الفَضلِ علَيهِ، بل قتَلَ ا‏بنَهُ الّذي قالَ عِندَ موتِهِ: «الرّبُّ يرى وينتَقِمُ».
آخر أيام يوآش
(2مل 12‏:18‏-22)
23 وفي خريفِ‌ تِلكَ السَّنةِ زحَفَ جيشُ آرامَ على يَهوذا وأورُشليمَ وقتَلوا جميعَ أعيانِ الشَّعبِ وأرسَلوا كُلَّ غَنائِمِهِم إلى مَلِكِ دِمشقَ، 24 ومعَ أنَّ الجيشَ الآراميَّ كانَ قليلَ العدَدِ، فإنَّ الرّبَّ أسلَمَ إلى أيديهِم جيشَ يَهوذا العظيمَ جِدًّا، لأنَّ الشَّعبَ تَركوا الرّبَّ إلهَ آبائِهِم. وأتَمَّ جيشُ آرامَ قضاءَ الرّبِّ على يوآشَ، 25 إذ تَركوه مُصابا بِـجِراحٍ كثيرةٍ، فا‏تَّفَقَ علَيهِ خَدَمُهُ ا‏نتِقاما لِدَمِ ا‏بنِ‌ يُوياداعَ الكاهنِ وقتَلوهُ في سريرِهِ. فدُفنَ في مدينةِ داوُدَ، لا في مقابِرِ المُلوكِ. 26 وكانَ مِمَّنْ تآمرَ علَيهِ زابادُ بنُ شَمعَةَ العَمُّونيَّةِ، ويوزابادُ بنُ شِمْريتَ الموآبـيَّةِ. 27 أمَّا سيرَةُ بَنيهِ، وكثرةُ النُّبوءاتِ علَيهِ، وترميمُهُ هَيكلَ الرّبِّ، هذا كُلُّهُ مُدَوَّنٌ في شرحِ سِفرِ المُلوكِ. وملَكَ أمَصْيا ا‏بنُهُ مكانَهُ.
Reinado de Joás de Judá
(2 R 12.1-21)
1 Joás tenía siete años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén cuarenta años. Su madre se llamaba Sibiá, y era de Berseba.
2 Mientras el sacerdote Joyadá vivía, Joás hizo lo recto a los ojos del Señor.
3 Y Joyadá eligió dos mujeres para Joás, y con ellas Joás engendró hijos e hijas.
4 Pasado algún tiempo, Joás decidió restaurar el templo del Señor,
5 así que reunió a los sacerdotes y los levitas, y les dijo:
«Vayan por las ciudades de Judá, y recojan dinero de todos los israelitas para que cada año sea reparado el templo de su Dios. Trabajen en esto con mucha diligencia.»
Pero como los levitas no lo hicieron así,
6 el rey llamó al sumo sacerdote Joyadá y le dijo:
«¿Por qué no has puesto empeño en que los levitas recojan de Judá y de Jerusalén la ofrenda que Moisés, el siervo del Señor, impuso a la congregación israelita para el tabernáculo del testimonio?»
7 Y es que la impía Atalía y sus hijos habían destruido el templo de Dios, y además habían dilapidado en los ídolos todos los objetos consagrados del templo del Señor.
8 Por eso el rey mandó hacer un cofre, y que lo pusieran a la entrada del templo del Señor.
9 Además, mandó pregonar por todo Judá y Jerusalén que se presentara al Señor la ofrenda que Moisés, el siervo de Dios, había impuesto a Israel en el desierto.
10 Con mucha alegría, todos los jefes y todo el pueblo llegaron con sus ofrendas y las echaron en el cofre, hasta llenarlo.
11 Cuando llegaba el momento de que los levitas llevaran el cofre al secretario del rey, si veían que había mucho dinero, el escriba del rey y alguien nombrado por el sumo sacerdote venían por el arca y, luego de vaciarla, la devolvían a su lugar. Esto lo hacían diariamente, y recogían mucho dinero;
12 entonces el rey y Joyadá se lo daban a los que trabajaban en las reparaciones del templo del Señor.
En la reconstrucción del templo del Señor se empleaban canteros, carpinteros y artífices en hierro y bronce.
13 Estos artesanos realizaban la obra, y con sus propias manos el templo de Dios fue restaurado y devuelto a su antigua condición.
14 Cuando terminaron, devolvieron al rey y a Joyadá el resto del dinero, y con él se hicieron utensilios para el servicio del templo del Señor, tales como morteros, cucharas, y vasos de oro y de plata.
Mientras Joyadá vivía, continuamente se sacrificaban holocaustos en el templo del Señor;
15 pero Joyadá envejeció, y murió siendo ya un anciano de ciento treinta años.
16 Fue sepultado junto con los reyes en la ciudad de David, pues se tomó en cuenta el bien que había hecho por Israel, y para Dios y su templo.
17 A la muerte de Joyadá los jefes de Judá se presentaron ante el rey y le juraron obediencia, y el rey los atendió.
18 Pero descuidaron el templo del Señor, el Dios de sus padres, y rindieron culto a los símbolos de Asera y a las imágenes esculpidas, así que por este pecado la ira de Dios vino sobre Judá y Jerusalén.
19 El Señor les envió profetas para que se volvieran a él, y los profetas los amonestaron, pero ellos no les hicieron caso.
20 Entonces el espíritu de Dios vino sobre Zacarías, hijo del sacerdote Joyadá, y este, de pie en un lugar donde todo el pueblo pudiera verlo, les dijo:
«Así ha dicho Dios: “¿Por qué quebrantan ustedes los mandamientos del Señor?” Eso les va a costar caro. Por haberse apartado del Señor, él también se apartará de ustedes.»
21 Pero ellos conspiraron contra él, y por órdenes del rey lo apedrearon en el patio del templo del Señor, y lo mataron.
22 Fue así como el rey Joás se olvidó de la bondad con que Joyadá, el padre de Zacarías, lo había tratado, y hasta mató a su hijo. Antes de morir, Zacarías sentenció: «El Señor es testigo, y habrá de pedirles cuentas.»
23 Un año después, el ejército de Siria atacó a Judá y a Jerusalén, y acabó con todos los jefes del pueblo, y todo el botín de guerra lo envió al rey de Damasco.
24 En realidad, el ejército de Siria había venido con muy poca gente, pero el Señor puso en sus manos al poderoso ejército de Joás porque este se apartó del Señor, el Dios de sus padres. Esta fue la sentencia del Señor contra Joás.
25 Cuando los sirios se fueron, dejaron a Joás agobiado por sus dolencias. Además, sus siervos conspiraron contra él por causa de la muerte de los hijos del sacerdote Joyadá, y lo mataron en su propia cama. Y Joás fue sepultado en la ciudad de David, aunque no en los sepulcros de los reyes.
26 Los que conspiraron contra él fueron Zabad hijo de Simeat, el amonita, y Jozabad hijo de Simerit, el moabita.
27 En cuanto a los hijos de Joás, y el incremento de tributos que este estableció, y la restauración del templo del Señor, todo está escrito en la historia del libro de los reyes. En lugar de Joás, subió al trono su hijo Amasías.